viernes, 8 de marzo de 2013

¿ APRENDÍ...?

En el camino aprendí
que llegar a algo no es crecer,
que mirar no es siempre ver,
ni que escuchar es oír,
ni lamentarse sentir,
ni acostumbrarse querer.
En el camino aprendí
que andar solo no es soledad,
que cobardía no es paz,
ni ser feliz, sonreír
y que peor que mentir
es silenciar la verdad.
En el camino aprendí
que la ignorancia no es no saber,
ignorante es ese ser
cuya arrogancia más vil
es de bruto presumir
y no quere aprender.
En el camino aprendí
que puede un sueño de amor
abrirse como una flor
y como esa flor morir,
y que su breve existir
fue todo aroma y color.
En el camino aprendí
que la humildad no es sumisión,
la humildad es ese don
que se suele confundir.
No es lo mismo ser servil
que ser un buen servidor.
En el camino aprendí
que la ternura no es doblez,
ni vulgar la sencillez,
ni lo solemne verdad;
vi al poderoso mortal
y a tontos con altivez.
En el camino aprendí
que es mala la caridad
del ser humano que da
esperando recibir,
que no hay defecto más ruin
que presumir de bondad.
En el camino aprendí
que en cuestión de conocer,
de razonar y saber,
es importante, entendí,
mucho más que lo que vi,
lo que me queda por ver.


lunes, 4 de marzo de 2013

OLAS

Te me acercas

      contándome al oído milagros

      de miles de leyendas

      que quedaron entre tus aguas.

      Me salpicas

      con espumas inundadas de misterios

      de otros tiempos y distancias,

      con lamentos de promesas

      que perdieron sus palabras

      en tus bajamares intensos...

      Y yo me acerco y te salpico

      sabiéndome tan pequeño,

      tan desconsoladamente chico,

      tan solo entre mis gentes cotidianas,

      que me apabullan tus mareas,

      tus olas y tus resacas.

      A veces me respondes...

      Pero de continuo callas y resbalas

      en las arenas de mi playa

      que esperan impacientes tus respuestas.